En la industria moderna, la complejidad de los procesos productivos es cada vez mayor, la fijación en el detalle, los altos estándares de calidad cada vez más exigentes son variables que aumentan la necesidad de mano de obra calificada. lo anterior reta a los líderes de los procesos a optimizar y automatizar operaciones que sean susceptibles para ello, utilizando tecnologías de última generación. En esta oportunidad hablaremos de visión artificial y como esta permitió en uno de nuestros clientes ser más eficientes en el proceso de selección de producto, agregando valor y aumentando la competitividad.
La visión artificial ayuda a estandarizar procesos que pueden ser subjetivos en algunos casos, en especial en el de inspección de producto, donde existen ciertos criterios como tonalidades, defectos e incluso tamaños
En la industria agrícola, la calidad del producto está sujeta a diferentes características, una de ellas es el tamaño, esta clasificación permite tener tipologías de producto de cara al cliente, incidiendo en la definición de precio y rentabilidad del producto.
Antes de implementar el proceso con visión artificial, esa clasificación no se hacía al detalle ni se lograba al 100%. Por muestreo estadístico se otorgaba una clasificación que podría generar en algunos casos entregar un mejor producto vendido a un menor precio, y en otros casos generar insatisfacciones al cliente por la variación presentada en cada lote.